El lunes 3, los técnicos de la DPF Juan Poch, Ana Saura, Mauricio Santaca y Ezequiel Dimarco y la Técnica Regional Celia Linares, viajaron desde Formosa a Juárez, distante 500 km, junto con los técnicos del Ministerio de la Producción y Ambiente de Formosa, Claudia Rham y Victor Franco.
Técnicos de la DPF reunidos con equipo de Fundación G.C. |
El martes 4, antes de emprender la visita a campo, se reunieron con el equipo de la Fundación Gran Chaco, quienes trabajan con las comunidades: la coordinadora, Fabiana Mena, y sus técnicos Edgar Torres, Orlando Gonzales y un referente toba del Departamento Bermejo, Carlos Ortiz. En la reunión, Fabiana Mena dio un pantallazo de los principales problemas locales, resaltando como de gran gravedad el factor clima: hace más de un año no llueve en la región, existiendo un déficit inclusive para el consumo humano. Por otra parte, debido a los incendios, en muchos casos se han perdido cercos, los cuales resultan fundamentales por las características productivas de la región.
En cuanto a las fortalezas, comentó que luego de años de trabajo con las comunidades, se está afianzando cada vez más el asociativismo, el trabajo articulado y cooperativo entre los integrantes de las comunidades y otros actores sociales e instituciones. En este sentido, informó que son beneficiarios de Subproyectos de Producción y Conservación para Pequeños Productores -financiados por el Proyecto de Plantaciones Forestales Sustentables-, y que los planes aprobados en general están relacionados con el recurso agua. Teniendo en cuenta esto, las próximas plantaciones serán realizadas bajo riego. La financiación de estas obras da muchas esperanzas, no sólo para la sobrevida de los algarrobos, sino primordialmente para asegurar a la gente del lugar la disponibilidad de este recurso vital.
Federico de Pozo Las Chivas mostrando las plantas protegidas |
Algarrobo protegido con chaguar |
Una vez en el territorio de la comunidad toba en el Paraje El Churcal, los técnicos de la DPF pudieron comprobar el estado de las plantaciones. Más allá de la cantidad de hectáreas logradas, lo más valioso es que en un clima tan riguroso con un verano de más de 40° y escasas lluvias, los habitantes han logrado sin ningún sistema de riego, realizar la plantación y cuidarla. Esto es muy importante ya que los integrantes de la comunidad pudieron organizarse, dividir las actividades y complementar sus tareas de artesanías, convirtiéndose en forestadores de pequeña escala.
En este sentido, Sindulfo González, referente toba de La Rinconada, contó que “la última lluvia fue el 14 de abril de 2012, por lo tanto han racionado la poca agua para consumo humano, para poder regar sus plantitas, porque para ellos es muy importante el logro de esas plantaciones”. En las recorridas los técnicos de la DPF pudieron conocer y alentar las distintas estrategias de riego por parte de algunos forestadores que, en esas condiciones de aridez, les permitieron lograr bunos resultados, como por ejemplo, el goteo con botellas de plástico o poceados estratificados para conservar la humedad.
Otra experiencia que mostró la fortaleza y solidaridad de la gente del lugar, fue la contada por un agricultor de la comunidad quien tiene plantados algarrobos con maíz y porotos. Decía que no pensaba cortar los algarrobos, porque algunas plantas ya tienen chauchas y para ellos es alimento, y seguramente sus vecinos van a venir a cosechar, así como se llevan porotos o maíz. Compartir es parte de la estrategia de vida de este poblador.
A su vez, los técnicos de la DPF aprovecharon para contar a los habitantes y a los recientes forestadores cómo cuidar sus plantas, de qué manera podar y ralear la plantación para que sea más sana y para que se puedan aprovechar de la mejor manera los recursos no maderables -como chauchas, miel, leña, etc.- que la misma brinda. Además, respondieron a las consultas que fueron surgiendo en cada visita y en la revisión de las distintas plantaciones.
Juan Poch, técnico de la DPF, y Sindulfo en La Rinconada |
Fueron cinco días muy exigidos, por las distancias, los caminos muy polvorientos y en mal estado, por las largas horas de trabajo, saliendo de Juárez todos los días a la mañana bien temprano y regresando por la noche, compartiendo un sándwich, agua, alguna que otra gaseosa con los referentes tobas o wichis, con los técnicos de la provincia, con los choferes. Pero la experiencia fue muy enriquecedora ya que se conformó un excelente grupo de trabajo y se aprendieron muchas lecciones de vida en base a lo visto, lo hablado, lo vivido con los habitantes de cada territorio.
Fuente: Técnica Regional para Parque Chaqueño de la Dirección de Producción Forestal del MaGyP, Ing. Celia Linares.